Como instaladores de ventanas de PVC en Madrid, queremos compartir contigo en este post una serie de consejos sobre el mantenimiento de estos cerramientos.
Las ventanas de PVC son un producto casi eterno. Aunque necesitan un mantenimiento mínimo para lucir impecables, es importante que cuides su limpieza y conservación para que permanezcan en buen estado.
Para limpiar los perfiles de PVC, puedes usar una bayeta húmeda, mojada con una mezcla de agua y el jabón neutro que uses habitualmente. En función de la suciedad acumulada en la ventana, puedes hacer esta rutina una vez al mes, cada dos o tres meses, etc.
Como expertos instaladores de ventanas de PVC en Madrid, queremos destacar la importancia de limpiar las juntas. Estas son de goma y se fabrican con diferentes tipos de materiales plásticos. Es conveniente espolvorear sobre su superficie polvos de talco una vez al año para conservar su flexibilidad y que se mantengan en perfecto estado. No es necesario, sin embargo, que utilices el detergente, puesto que los muy concentrados podrían dañarlas.
También tendrás que limpiar los herrajes. Respecto a su mantenimiento, hay que señalar la importancia de lubricar, como mínimo una vez al año, todas las partes móviles con un aceite especial. Asimismo, hay que ajustar los mecanismos de apertura oscilobatiente.
Desde Aluminios Tello, como especialistas en cerramientos de PVC, te animamos a disfrutar de las ventajas de este material, que destaca por una capacidad de aislamiento más potente que el aluminio y necesita menos mantenimiento que la madera.