El mejor cuidado para tus ventanas de aluminio

Todos los que ya tienen ventanas de aluminio en Griñón coinciden en que ha sido un acierto, ya que el aluminio es un material que no se corroe, no absorbe humedad y los acabados son sumamente resistentes a las inclemencias del tiempo. Para que tus ventanas duren lo máximo posible y mantengan sus propiedades al cien por cien, sigue los siguiente consejos de limpieza.

Cuando vayas a limpiar tus ventanas de aluminio en Griñón lo preferible es que utilices una solución de agua caliente con algún tipo de detergente suave para el marco y el cristal. Para el aluminio, un cepillo de cerdas suaves o un paño es lo mejor. Así el material no se arañará. Además, recuerda que estas ventanas no necesitan un patrón de limpieza determinado, es preferible que las limpies cuando estén sucias y no por el hecho de seguir un horario. 

Utiliza crema líquida abrasiva o un limpiador a base de parafina cuando en el marco aparezcan manchas complicadas de eliminar. Si vives en una zona donde la contaminación atmosférica es habitual te interesará saber que el aguarrás es el mejor producto. Las ventanas te quedarán limpias y en perfecto estado.

Productos que seguramente tienes en casa también te ayudarán a mantener limpio tu aluminio. Estos productos son el vinagre, la harina y la sal. Pon una cucharada de sal en un vaso con vinagre blanco y añade la harina poco a poco hasta que se forme una masa. Antes de utilizar la masa, verifica que esta no va a dañar el aluminio. Lo mejor es que la extiendas en una esquina en una pequeña cantidad. Después, aplica la pasta en el metal con un paño y deja actuar quince minutos. Si tus ventanas están muy sucias puedes dejarlo hasta una hora. Aclara la superficie con agua tibia y sécala con un paño suave.

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