Por la experiencia acumulada durante años en la venta e instalación de ventanas de aluminio en Griñón podemos asegurar que la variedad de colores en los que es posible elegir el acabado de los cerramientos es uno de los factores que más influyen a la hora de decidirse. Cuando se trata de aluminio, la gama de colores entre los que se puede escoger va depender del método empleado para el acabado de los perfiles: el anodizado o el lacado.

En ambos casos, se trata de métodos ideados con el objeto de proteger el metal de los efectos de la corrosión originada por los fenómenos meteorológicos como la humedad, las variaciones en las temperaturas, o como resultado por los agentes de la contaminación atmosférica.

Cuando las condiciones meteorológicas son más duras o se ven agravadas por agentes como los restos de salitre en el ambiente, el proceso del anodizado va a ofrecer una mejor protección a las ventanas de aluminio en Griñón. El anodizado es un procedimiento de hidrólisis mediante el que se controla la oxidación del aluminio para crear una capa uniforme que protegerá durante años y años los diferentes elementos de los cerramientos. Esta capa se consigue por medio de procedimientos electroquímicos, de manera que se consigue una mayor resistencia y durabilidad del aluminio.

En el proceso del lacado se inicia con la aplicación de una capa de pintura en polvo lo que, de entrada, supone un abanico mucho más amplio de colores entre los que se puede elegir el acabado. Sea cual sea el método elegido, el mantenimiento de los ventanales será siempre igualmente sencillo y cómodo. Si necesitas más información no dudes en consultar con nosotros en Aluminios Tello.